Este año decidí marcarme un nuevo reto y ha sido estudiar
una carrera, que hace muchos años quise realizar, pero por diversos motivos me
era imposible. Esas barreras hoy ya no están y aquí estoy haciendo Filología hispánica
o Lengua y literatura española, como prefiráis llamarla.
Está siendo una experiencia única y maravillosa. Ser
universitaria a mis años es una sensación especial, por eso animo a todas las
personas que sienten que quisieran volver a estudiar y no se atreven. En mi
clase hay gente mayor que yo y es genial ver como están ahí, “viviendo”.
Amigos nunca es tarde para absolutamente nada. Doy fe.
Todo este rollo que os he contado es solo para deciros que
subiré cosas que me parezcan interesantes dentro de todas las materias que
estoy dando y, aunque apenas tengo tiempo de nada, haré un esfuerzo por subir
aquello que me genere un especial interés y que crea os sirva a vosotros, los
que estáis en frente de la pantalla y me leéis.
Os voy a dejar un poema para que penséis sobre él.
“Fruta del día Tienes
que vivir vidas.
No la tuya, no sólo la acordada,
también las aledañas, las pospuestas,
las previas, las futuras.
Las quiero todas ya,
recolectadas,
a punto de morder, de
entrar en boca,
de ablandarse en la lengua.
En esa cesta hay uvas esenciales,
cerezas infantiles,
húmedas fresas
que prometen bosques,
ese sabor a verde
ciruela del verano
y una pulpa dorada,
inmasticable.
Cómete ya tu propio
cerebro fatigado:
es la fruta del día.”
Aurora Luque, La siesta de Epicuro, 2008